Mi historia
David Leonardo Lizárraga Delgado, conocido artísticamente como David Lizárraga, es un productor y escritor musical nacido el 16 de diciembre de 2005 en Mazatlán, Sinaloa. Hijo de Joel Lizárraga, ex integrante de la legendaria Banda El Recodo, David proviene de una de las familias más influyentes en la historia del regional mexicano. Su padre, junto a su hermano Alfonso “Poncho” Lizárraga, ha estado al frente de la agrupación fundada por su propio padre, el icónico Don Cruz Lizárraga, considerado el creador de la banda sinaloense moderna.
Aunque su linaje está marcado por el legado musical, David eligió forjar un camino distinto. Si bien la música ha estado presente en su vida desde siempre, su pasión no nació únicamente de la herencia familiar, sino de una necesidad mucho más íntima. David es una persona reservada, con pocos amigos, y desde muy joven encontró en la música una forma de decir lo que no podía expresar en voz alta. Para él, producir y escribir no era una opción artística, sino una vía de escape, una herramienta emocional para expresarse sin filtros ni juicios.
Desde la adolescencia, comenzó a experimentar con la producción digital de manera autodidacta, fusionando géneros como el hip-hop alternativo, el R&B contemporáneo, la electrónica melancólica y matices del soul, creando un lenguaje sonoro propio. Sin el respaldo de una disquera y alejado de los reflectores del regional, David Lizárraga decidió abrirse paso como artista independiente, apostando por un estilo íntimo, atmosférico y honesto.
Sus composiciones, cargadas de emociones crudas, abordan temas como la soledad, la confusión emocional, el amor juvenil y el sentido de pertenencia. Su música no busca encajar en moldes comerciales, sino conectar con quienes también buscan refugio en el arte.
A pesar de su corta edad, David Leonardo Lizárraga Delgado ha comenzado a construir una identidad artística sólida y personal, lejos de las expectativas impuestas por su apellido o su entorno. Su enfoque no busca impresionar, sino conectar de forma real con quienes también sienten que no tienen un lugar definido. Más que seguir una fórmula, David ha optado por hablar desde la verdad, dejando que su música sea el espacio donde su voz, su historia y su sensibilidad encuentren sentido.